Sefina Saltalamata es conocida en todos los antros y lugares de fiesta a lo ancho del mundo descubierto, empezando por su hogar, el pueblo mediano de Cañafresca, lo que ya deja el listón bastante alto. Su leyenda se ha ido expandiendo poco a poco, llegando a un punto en el que no se sabe donde acaba la verdad y empieza la ficción. Quizás, la anécdota que más discusiones causa es la relativa a su encuentro con el Rey del Sábado Noche y como logró salir del Bailatorio. En realidad, la leyenda del Rey del Sábado Noche es tan antigua que nadie recuerda su origen, como suele pasar con las buenas leyendas. De vez en cuando aparece alguien asegurando haber entrado en el Bailatorio pero la desorientación y el olor a alcohol que suelen desprender quienes lo hacen desacredita automáticamente la autenticidad del relato. La leyenda cuenta como una de las almas en pena condenadas a vagar en comitiva por bosques y montes, aburrida de esta anodina existencia (o no-existencia), logró rompe